1 AM

¿a quien le hablas?, enterrada en el dolor. Imploras con desgarro, con furia de enojo, de carne roja descarnizada. De vientre de dolor, de viseras, de charcos de sangre, con las manos entrecerradas y los puños de sudor que supuran dolor , mil lagrimas gritan sangre en mi rostros ensangrentado. Porque...? Abofeteando las puertas del cielo me encuentro, ahí mismo, en el piso de mi habitación, arrastrándome, arrancándome los dientes, mordiéndome el cabello, con puños cerrados, atornillados en mis dedos, arrodillada, aplastada y encorvada. Escuchad desgarradores quejidos, lamentos y bramidos. Porque me lo has llevado. Lo amo. Lo amo... Es que lo extraño tanto. Me duele las entrañas y así el mundo sigue como si nada, ¿donde te has ido? me duelen las entrañas. Te imploro y te imploro, mientras me arranco los dientes en un charco de lagrimas, rojo de sangre, te amo, son mis viseras que te llaman, te llaman e imploran. Que me has hecho? entonces se repite. Y se repite y se repite... Derramada nuevamente en el piso, se desgarra el alma... viseras sangre bramidos y lagrimas. Me acurruco, me abrazo , pero dejo un espacio y es ahí donde te mezo, te mezo en mis brazos, luego te abrazo, te incorporo en mis viseras, en la panza y en mi alma. Tanto te amo. Me incorporo te mezo me incorporo. Te amo y regreso...con las manos sin nada. y los pechos llenos de leche y dolor.